viernes, noviembre 04, 2011

Elogio de la vagancia




Vagar, andar sin rumbo ni destino. Ésta es una de las ideas llegadas a mi mente o producidas en su interior, al ver este título. No es el propósito del autor, llevar al lector por rumbos y destinos desconocidos. La vagancia propuesta en este libro es la de ejercitar la mente. Es pensar. Y en esa idea de pensar el autor nos comparte sus vivencias y reflexiones. Algunos pasajes de viajes y meditaciones sobre lo visto y vivido es el contenido de este breve volumen de la autoría de Guillermo Fadanelli.

Podría pensarse que esta actividad es de la misma edad que la humanidad. Así lo dice el filósofo clásico. Pienso, luego existo. Existo y pienso. Y lo que piensa uno, lo piensan los demás o ¿cómo lo piensan? Cada quien ve el mundo bajo su propio pensamiento.

Que tanto se ha avanzado por lo descubierto en la naturaleza por la ciencia, convertida luego en técnica y tecnología. Sin duda mucho. Se viajo primero andando. Luego se viajo por los ríos, en canoas. Las embarcaciones, primero pequeñas y luego de grandes dimensiones, permitieron a la humanidad viajar por los océanos. Y así llegar a encontrar a otra parte de la humanidad que viajó por otra ruta y sin naves. Luego, al observar a las aves e insectos voladores, la humanidad pudo volar. Ahora hay miles de vuelos transatlánticos como un hecho cotidiano. Y hace más de tres décadas un hombre posó sus pies en nuestro satélite.

Paralelo al desarrollo de medios de más alta velocidad para viajar, para desplazarse, se dieron otro miles de cambios en la humanidad. Pero en lo esencial seguimos siendo lo mismo, un cuerpo y una mente. Y la mente humana seguirá desarrollando aplicaciones tecnológicas basadas en las leyes de la naturaleza, que han existido desde antes de la humanidad, que se han ido descubriendo.

La mente vaga. Y vagará. El destino será uno y millones o más. En tanto seamos capaces de preguntarnos ¿porqué? Podremos seguir vagando. Y viajando en nuestro planeta alrededor del sol y nuestro sistema solar en nuestra galaxia y ésta en el espacio. Y el universo nos seguirá asombrando.

Vaguemos.


Título: Elogio de la vagancia
Autor: Guillermo Fadanelli
Editorial: Lumen
Edición: Primera, noviembre de 2008.


1 comentario:

Clarice Baricco dijo...

A él solamente lo he leído en sus columnas y me gusta.
Buscaré el libro.