domingo, octubre 24, 2010

Treinta - treinta




Treinta carteles sobre el Bicentenario de la Independencia -más bien sobre el bicentenario del incio de la prolongada Guerra de Indepnedencia que duró once años, ya que concluyó en 1821-. Y otros treinta por el Centenario de la Revolución -o del inicio de la revolución, que no tiene una clara fecha de conclusión: 1917 con la nueva Constitución, 1938 con la expropiación del petróleo o ¿cuándo?-.





Los sesenta carteles conmemorativos son una exposición al aire libre, sobre las rejas del Museo de Antropología de Xalapa. Son obras de artistas xalapeñ@s y de otras latitudes. La muestra es patrocinada por el Instituto de Artes Gráficas de la Universidad Veracruzana. Los carteles podrían ser de mayor tamaño para apreciarse desde la acera de enfrente, lugar hay.






El título de la exposición está inspirado en las carabinas que utilizaron los revolucionarios. Estas obras destacan el gran atraso de México y las traiciones a la Revolución. Son de alguna manera una réplica de esas carabinas que se empuñaron hace cien años. Como lo dice el cartel de Frida Ocampo, Celebrando con el despojo de sus conquistas: recursos energéticos, tierras, educación pública y derechos laborales.


martes, octubre 19, 2010

Los mil y un velorios

Crónica de la nota roja en México



En algún momento las secciones de los diarios se fueron identificando por colores, reales o solo así nombrados. La rosa es la sección de las notas que hacen reseñas de los eventos sociales, del glamur  y otras exquisiteces. La amarilla es la de las notas sensacionalistas que retratan a los actores sociales –políticos, sindicales y otros- cuando son descubiertos en actos de corrupción. Y la roja es la sección de las notas policiacas, algunos diarios para gente culta no cuentan con ésta, otros están especializados en un solo color. Carlos Monsiváis se ocupó de analizar el contenido de las notas rojas a lo largo del siglo XX. Este libro es una crónica y ensayo sobre lo publicado en las secciones de policía de los diarios y revistas editadas en México.

¿Cuál de todos los crímenes será el más horrendo? Aquel que cause asombro hasta que suceda otro que sea más sanguinario y sorprendente. Ésta quizá hubiera sido la respuesta de Monsi. Lamentablemente fallecido hace pocos meses.

Asaltantes. Asesinos. Extorsionadores. Ladrones. Rateros. Secuestradores. Individualmente o en bandas, todos esos personajes son los sujetos de la nota color de la sangre hasta hace algunos años. Los últimos en aparecer en escena, en la nota roja, son los narcotraficantes. Son lo más elaborado dentro de la criminalidad. De tal manera que el semanario Proceso, antes especializado en política, por ejemplo, se ha ocupado desde su portada de las actividades de esos grupos delincuenciales, contra los que el gobierno federal sostiene una guerra sin que se noten avances.

De lo escrito por Monsiváis es de destacar:
La expansión del narco no es causa ni consecuencia de la pérdida de valores, es el episodio más grave hasta hoy conocido de la criminalidad como capítulo del capitalismo salvaje. Sí allí está el negocio, dónde se localicen las víctimas es lo de menos.

Es tal la criminalidad y sus actividades diarias que ya algunos medios no se ocupan de los casos, en tanto otros ya solo publican la cantidad de asesinados en el día. Las fotografías ya no impresionan. Algunos grupos ya recurren a la Internet para publicar sus videos para que se sepa sobre sus crímenes sobre otros criminales.

Para asombro, la nota roja ya no asombra. Hasta que vuelva a suceder algo asombroso, por su cantidad e intensidad de rojo o quizá la ausencia de éste.

Título: Los mil y un velorios
Autor: Carlos Monsiváis
Editorial: Debate
Edición: Primera, julio de 2010.

miércoles, octubre 13, 2010

El Infierno



Ácidos. Ametralladoras. Balas. Bazucas. Cuchillos. Gasolina. Granadas. Machetes. Pistolas. Rifles. Tambos. Sierras. Por si o convertidas en armamento son los instrumentos de trabajo de los protagonistas de esta cinta que retrata los años recientes de México, en este tiempo de Bicentenario y Centenario. Aquellas guerras evocadas por los festejos oficiales fueron: la primera por la independencia y la segunda por la reivindicación social, la actual es la manifestación más cruenta del atraso económico y político en la convivencia entre los mexicanos. No se respeta el estado de derecho. Se impone la fuerza de las balas y para conseguirlas se necesita mucho dinero y para conseguir éste hay que comercializar un producto por el que se pagan muchos dólares: droga.

Para algunos paisanos del norte la migración a los EE UU ya no es la solución, la migra los detecta, los arresta y deporta. Regresan a la realidad presente. Ante la falta de otras oportunidades y poder hacer frente a las necesidades de la vida diaria se van incorporando a esas células del ejército que no se ve, pero se ven a sus víctimas retratadas en los periódicos. La televisión dejó de presentar en sus notas los cuerpos sin cabeza o las cabezas sin cuerpo o los cuerpos pendiendo debajo de un puente.

Este sexenio de gobierno ya lleva en sus registros más de 28 mil muertos y diariamente siguen matándose entre criminales. No hay estado de derecho en varias regiones. Las autoridades, locales y federal, son exhibidas de estar en contubernio con las bandas criminales. Sólo es cine dirán algunos. Es cine y se queda corto en su alcance de retratar la criminalidad. No están las bandas que producen y venden discos de música y video fuera de la ley y que están en todas las calles de México.

El ejército ya lleva cuatro años en las calles y carreteras de México y la cifra de muertos sigue creciendo. Esta estrategia del gobierno federal no está funcionando para disminuir la criminalidad. Monterrey, la otrora tranquila ciudad industrial, es testigo de bloqueos del tránsito por bandas criminales, de balaceras en las que han muerto estudiantes de la Universidad y del Tecnológico. Ya no se diga Chihuahua, la fronteriza Juárez y otras ciudades y pueblos. En la pantalla solo se ve la violencia que cabe en ella.

¿Y las rutas del dinero?
¿Y las rutas de las armas?

Esta cinta nos muestra de manera cruda la realidad de México actual.

Título: El infierno
Director: Luís Estrada




martes, octubre 05, 2010

Hidalgo

La historia jamás contada


Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla y de Gallaga entró en la historia de México al amanecer del 16 de septiembre de 1810, cuando era un hombre maduro, e inicio, junto con un grupo de valientes y una tropa improvisada, la guerra por la Independencia de México.

¿Quién fue ese párroco de pueblo? Es la historia que nos pretende contar la película dirigida por Antonio Serrano y protagonizada por Demián Bichir. Era un ser que le gustaba y disfrutaba de la libertad y de la vida. A la manera como lo diría alguna vez José Martí: la libertad está en la cultura. Hidalgo fue un hombre culto. Retroceder más de doscientos años en la historia de este país es el ejercicio a que se refiere este filme, cuando una de las pocas maneras de tener acceso a la cultura era el sacerdocio.

Hidalgo, el que gustaba de las lecturas entonces prohibidas, del teatro, de la música, del baile y de la bebida, fue también el hombre sensible ante la forma de vida de los indios segregados del progreso novohispano. Era un rebelde.

Pocas historias en el mundo como la de Hidalgo. Aderezadas de la creatividad del director de la película. Nadie estuvo en ese tiempo con una cámara para publicar en youtube lo que sucedía en la vida de Hidalgo, el hombre. Sólo lo espiaban los defensores acérrimos del estado de cosas y la quietud novohispana. Y contra ese estado de cosas se rebeló Hidalgo.




Título: Hidalgo, la historia jamás contada
Director: Antonio Serrano.