domingo, enero 27, 2008

La otra Nueva España

Evocar a la Nueva España es para algunos la memoria histórica de la conquista española de las tierras mesoamericanas, la época virreinal, la nulificación de las culturas prehispánicas por el avasallamiento europeo, el doloroso mestizaje y, de alguna forma, la forja de la nación mexicana.

Andrés Henestrosa, mediante sus artículos periodísticos recopilados en este libro, nos lleva a un viaje por la Otra Nueva España. Ésta, la de los intelectuales, escritores, artistas y otros profesionales, que vinieron exiliados a México como consecuencia de la derrota que sufrieron los republicanos en la Guerra Civil Española en la última parte de la cuarta década del siglo XX.

La otra Nueva España tuvo un territorio en la ciudad de México. El barrio donde fijaron sus residencias los intelectuales republicanos, o la mayoría de ellos, y que Henestrosa ubica en el polígono que forman el Paseo de la Reforma, las avenidas Insurgentes y Puente de Alvarado y la calle Rosales. Ahí se ubica el Monumento a la Revolución entre otras construcciones.

Uno a uno de esos republicanos los va citando Henestrosa en sus artículos. Desfilan: Miguel de Unamuno, León Felipe Camino Galicia, Luís Suárez y varios más. Llegan a la cita con Henestrosa: José Ortega y Gasset y Juan Ramón Jiménez, premio Novel de Literatura. Un libro de evocaciones a las maestros de quienes aprendió el autor y con quienes compartió en tertulias y otros encuentros.

Desde que leí por primera vez sobre la Guerra Civil Española, mi idea de España cambió. Supe desde entonces que no sólo era tierra de gachupines, sino también de españoles cuya mejor generación de las que han arribado a nuestras tierras ha sido precisamente la de los republicanos exiliados. Leyendo a Henestrosa confirmó que es cierto. Mucho debemos los mexicanos en términos del desarrollo de la cultura a esa generación de refugiados. Agregaré, que quienes vinieron entonces exiliados no todos eran intelectuales, algunos de ellos obreros o dedicados a otros menesteres, entre ellos el padre y la madre de mi amigo Joaquín. Todos, sin duda aportaron al México moderno y su descendencia, ya mexicana, sigue contribuyendo.

Cito a Henestrosa, del primer artículo reproducido en su libro:

Aquel 18 de julio

El jueves 18 de julio de 1836, salí de México a Estados Unidos becado por la John Simon Guggenheim Memorial Fundation. Iba triste, con el fin de por allá quedarme… Aquel mismo día estalló la Guerra Civil Española, tan cruenta, tan larga, como aquella de México llamada Guerra de los Tres Años, promovida, como la española, por la máxima reacción conservadora. A bordo del tren que me llevaba a Palo Alto –otro nombre y otra fecha triste para México- hice un recuento de mis días, de una lucha que siete años antes habíamos perdido para México*, según seguía creyéndolo. Pasé lista a mis compañeros de aventura, de aulas, de lecturas. Llamé a concilio a los viejos maestros hispanoamericanos…

Y sigue.

Andrés Henestrosa falleció hace pocos días, dos semanas. Muchos supieron de él por su muerte. Otros por su longeva existencia. Vivió 101 años. En éste su libro nos platica de su convivencia con otros grandes de las letras y de otras artes, para decirlo en esa manera de usar el lenguaje por el maestro.

Título: La otra Nueva España
Autor: Andrés Henestrosa
Editorial: Porrúa
Edición: Primera, julio de 2001.


*Henestrosa se refiere, sin mencionarlo en el texto, a la lucha de José Vasconcelos por la Presidencia de México en 1929, habiendo sido derrotado él con sus seguidores, Henestrosa entre ellos, mediante una gran represión y fraude cometidos por el Partido Nacional Revolucionario, recién fundado entonces por Plutarco Elías Calles, luego Partido de la Revolución Mexicana y antecedente del actual Partido Revolucionario Institucional que en forma autoritaria detentó el poder por siete décadas del siglo XX, desde 1929 hasta 2000.


Sobre la Guerra Civil Española y sus secuelas en México, en este blog:

Y sobre la lucha de Vasconcelos, también en este blog:

1 comentario:

Clarice Baricco dijo...

Otro libro que me presentas.
Lo tomo en cuenta.

Abrazos